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Activa El Poder De Dios Y Los Milagros - Pastor Julio Severiche

En 2 Corintios 4:7, la Escritura nos recuerda que somos "vasos de barro" que contienen un tesoro valioso: el poder de Dios que actúa en nosotros, no por nuestras fuerzas, sino por Su gracia. Esta verdad nos invita a reflexionar sobre nuestra fe y relación con Él. El tema central se desarrolla con un llamado a entrar a la casa de Jesús, simbolizando nuestra disposición a recibirlo plenamente en nuestra vida, reconociendo Su poder transformador. Al imaginar cómo habría sido convivir con Jesús, se destaca que incluso sus propios hermanos no creían en Él, como lo dice Juan 7:5. Sin embargo, Jesús, lleno de amor, no los rechazó, sino que después de resucitar, se apareció a Jacobo, uno de sus hermanos incrédulos. Este encuentro transformó la vida de Jacobo, mostrándonos que el poder de Dios puede cambiar incluso los corazones más duros. A través de este mensaje, se nos invita a reflexionar sobre nuestras propias actitudes hacia Dios. No basta con creer superficialmente; debemos obedecer su Palabra, confiar en su poder, y vivir en su propósito. Así como Jacobo pasó de la incredulidad al arrepentimiento y a la fe activa, nosotros también podemos experimentar el poder y los milagros de Dios si nos acercamos a Él con humildad y disposición. El Señor no nos reprocha nuestras fallas, sino que nos extiende Su gracia y nos invita a ser parte de sus planes eternos. Su poder se perfecciona en nuestra debilidad, y en Su amor, Él sigue obrando milagros en nuestras vidas.

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Activa El Poder De Dios Y Los Milagros - Pastor Julio Severiche - Predicacion

Predicacion sobre oracion: En 2 Corintios 4:7, la Escritura nos recuerda que somos "vasos de barro" que contienen un tesoro valioso: el poder de Dios que actúa en nosotros, no por nuestras fuerzas, sino por Su gracia. Esta verdad nos invita a reflexionar sobre nuestra fe y relación con Él. El tema central se desarrolla con un llamado a entrar a la casa de Jesús, simbolizando nuestra disposición a recibirlo plenamente en nuestra vida, reconociendo Su poder transformador. Al imaginar cómo habría sido convivir con Jesús, se destaca que incluso sus propios hermanos no creían en Él, como lo dice Juan 7:5. Sin embargo, Jesús, lleno de amor, no los rechazó, sino que después de resucitar, se apareció a Jacobo, uno de sus hermanos incrédulos. Este encuentro transformó la vida de Jacobo, mostrándonos que el poder de Dios puede cambiar incluso los corazones más duros. A través de este mensaje, se nos invita a reflexionar sobre nuestras propias actitudes hacia Dios. No basta con creer superficialmente; debemos obedecer su Palabra, confiar en su poder, y vivir en su propósito. Así como Jacobo pasó de la incredulidad al arrepentimiento y a la fe activa, nosotros también podemos experimentar el poder y los milagros de Dios si nos acercamos a Él con humildad y disposición. El Señor no nos reprocha nuestras fallas, sino que nos extiende Su gracia y nos invita a ser parte de sus planes eternos. Su poder se perfecciona en nuestra debilidad, y en Su amor, Él sigue obrando milagros en nuestras vidas.