SalmosBuscar
144Buscar
capitulo anterior
capitulo anterior
Coincidencias: 0 Cerrar X
GénesisÉxodoLevíticoNúmerosDeuteronomioJosuéJuecesRut1 Samuel2 Samuel1 Reyes2 Reyes1 Crónicas2 CrónicasEsdrasNehemíasEsterJobSalmosProverbiosEclesiastésCantaresIsaíasJeremíasLamentacionesEzequielDanielOseasJoelAmósAbdíasJonásMiqueasNahumHabacucSofoníasHageoZacaríasMalaquíasMateoMarcosLucasJuanHechosRomanos1 Corintios2 CorintiosGálatasEfesiosFilipensesColosenses1 Tesalonicenses2 Tesalonicenses1 Timoteo2 TimoteoTitoFilemónHebreosSantiago1 Pedro2 Pedro1 Juan2 Juan3 JuanJudasApocalipsis
123456789101112131415161718192021222324252627282930313233343536373839404142434445464748495051525354555657585960616263646566676869707172737475767778798081828384858687888990919293949596979899100101102103104105106107108109110111112113114115116117118119120121122123124125126127128129130131132133134135136137138139140141142143144145146147148149150

Salmos 144 - 1

1. Bendito sea Jehová, mi roca, Quien adiestra mis manos para la batalla, Y mis dedos para la guerra;

2. Misericordia mía y mi castillo, Fortaleza mía y mi libertador, Escudo mío, en quien he confiado; El que sujeta a mi pueblo debajo de mí.

3. Oh Jehová, ¿qué es el hombre, para que en él pienses, O el hijo de hombre, para que lo estimes?

4. El hombre es semejante a la vanidad; Sus días son como la sombra que pasa.

5. Oh Jehová, inclina tus cielos y desciende; Toca los montes, y humeen.

6. Despide relámpagos y disípalos, Envía tus saetas y túrbalos.

7. Envía tu mano desde lo alto; Redímeme, y sácame de las muchas aguas, De la mano de los hombres extraños,

8. Cuya boca habla vanidad, Y cuya diestra es diestra de mentira.

9. Oh Dios, a ti cantaré cántico nuevo; Con salterio, con decacordio cantaré a ti.

10. Tú, el que da victoria a los reyes, El que rescata de maligna espada a David su siervo.

11. Rescátame, y líbrame de la mano de los hombres extraños, Cuya boca habla vanidad, Y cuya diestra es diestra de mentira.

12. Sean nuestros hijos como plantas crecidas en su juventud, Nuestras hijas como esquinas labradas como las de un palacio;

13. Nuestros graneros llenos, provistos de toda suerte de grano; Nuestros ganados, que se multipliquen a millares y decenas de millares en nuestros campos;

14. Nuestros bueyes estén fuertes para el trabajo; No tengamos asalto, ni que hacer salida, Ni grito de alarma en nuestras plazas.

15. Bienaventurado el pueblo que tiene esto; Bienaventurado el pueblo cuyo Dios es Jehová.

capitulo anterior
capitulo anterior
Compartir

Copia Exitosa

ImagenesVer mas

LecturasVer mas

MusicaVer mas